Beneficios del salmón

Beneficios del salmón

El salmón es considerado un alimento muy completo ideal para incluir en cualquier dieta. Debido a su gran cantidad de nutrientes y beneficios para nuestra salud, se trata de un ingrediente que encontramos presente en multitud de gastronomías.

Aunque se elabore de diferente manera, el salmón se utiliza tanto en la gastronomía oriental cómo occidental. En Japón se lleva usando desde hace muchos años al tratarse de un país donde predomina el pescado. Se trata de un alimento muy versátil que se puede comer cocinado, crudo, en frío o en caliente, en pasteles… Encontramos pocos pescados que dan tanto juego en la cocina.

Una de las características de este pescado en la cocina es que hay que evitar cocinarlo en exceso. Una cocción excesiva puede provocar una degradación de sus grasas esenciales y restarle propiedades beneficiosas para nuestra salud.

 

Beneficios del salmón en nuestro organismo

El salmón es un pescado azul que aporta aproximadamente 12 gramos de grasa por cada 100 gramos. Esto es un contenido similar al de las sardinas o el atún, este último muy consumido en el país nipón.

Contribuye a disminuir los niveles de colesterol malo y los triglicéridos plasmáticos aumentando la fluidez de la sangre, permitiendo así la prevención de la formación de coágulos o trombos. Debido a sus grandes beneficios en la salud, se recomienda el consumo habitual de salmón varias veces por semana. El salmón es una excelente fuente de proteínas ideal para incluir en nuestra dieta, al igual que el resto de pescados de la misma categoría.

Previene accidentes vasculares

Se trata de un pescado con un alto contenido en ácidos grasos omega-3. Estos favorecen el sistema circulatorio y regulan nuestra presión arterial. A su vez, retrasan el endurecimiento de las arterias, previniendo de esta manera ataques al corazón.

Los ácidos grasos omega 3 del salmón combaten de manera eficaz nuestra sequedad ocular, reduciendo un 40% el riesgo de degeneración macular y un 30% el de padecer cataratas.

Vitaminas y minerales

Al tratarse de un ingrediente con un alto valor en grasas saludables, podemos encontrar en el salmón un alto contenido en vitaminas liposolubles como la vitamina E y la vitamina D. Entre las funciones de esta primera, destacamos su acción antioxidante que constituye un factor protector frente a ciertas enfermedades cardiovasculares, degenerativas y cáncer. Por otro lado, la vitamina D regula los niveles de calcio en sangre favoreciendo la absorción y fijación de este mineral en nuestros huesos.

En cuanto a los minerales, el salmón posee un alto contenido en fósforo, potasio y selenio. Cabe destacar que su contenido en hierro es inferior al de la mayoría de pescados. El potasio es necesario para la actividad muscular y el sistema nervioso. El fósforo está presente en los dientes y huesos e interviene en los procesos de obtención de energía para nuestro cuerpo.

Por último, el selenio es un antioxidante que participa también en el metabolismo de las grasas y en el sistema inmunológico de nuestro organismo.

 

La importancia del salmón en la gastronomía de todo el mundo

Cuando hablamos de salmón estamos hablando de un alimento con altos nutrientes que se ha ganado su reputación como uno de los alimentos más saludables de todo mundo. Es una excelente fuente de vitaminas B6 y B12, ácidos grasos, proteínas, selenio, magnesio, y además cuenta con un alto contenido en calcio.

Uno de los principales motivos por los cuales se trata de un alimento muy consumido en todo el mundo es por ser beneficioso para el corazón y el sistema circulatorio. Esto se debe a su alto contenido en omega-3 que permite bajar la presión arterial, reparar los tejidos, endurecer las arterias, lo que a su vez disminuye la posibilidad de sufrir ataques al corazón.